P

apers, Please fue lanzado el verano pasado y es uno de los últimos éxitos del panorama indie. El planteamiento del juego es el siguiente, principios de los 80 y encarnando a un funcionario de Inmigración nuestro cometido será el de aceptar o denegar el paso a nuestro país, la república comunista de Arstotzka. En ningún momento saldremos de la garita y nuestro trabajo consiste en verificar que la documentación está en regla o no y actuar en consecuencia. Visto así parece el juego más aburrido de la historia, ¿no? Pues no lo es, quizás no sea un juego para todos los públicos, pero es innegable que es un soplo de aire fresco, un juego que sin duda hay que probar.

 

El Ministerio nos entrega un manual con las reglas que imperan en ese momento y que hay que vigilar para su cumplimiento, las cuales a veces se endurecen por ataques terroristas en la frontera. Al cabo del día nos pagarán según el número de pasaportes estampados, por lo que no podremos perder demasiado tiempo en revisar la documentación de cada individuo. Tendremos que comprobar si la foto del pasaporte coincide con el individuo, si no lo tiene caducado o si por ejemplo pone que es mujer cuando es un hombre, algunas falsificaciones se ven a simple vista y otras no tanto.

 

Además tendremos que asumir al cabo de cada jornada el coste de la alimentación, alquiler y calefacción de nuestra mujer, hijo, suegra y tío y seremos informados de su estado de salud en la pantalla de resumen.

papers please en acción

Cuando nos equivoquemos, ya sea dejando pasar a alguien que no debíamos o al contrario, cuando rechacemos a alguien con los papeles en regla seremos amonestados y tras varios errores se nos impondrá una penalización económica que será descontada de nuestro salario. Esto es muy importante pues si acabamos con nuestros ahorros, seremos encarcelados y la partida dada por finalizada. Algo que está muy bien pensado es el sistema de guardado, pues podremos cargar el checkpoint de cualquier día pasado y así no tener que empezar desde el principio una nueva partida.

 

El juego tiene un componente ético muy interesante. Nos encontraremos con parejas que huyen de su país y están amenazadas de muerte, pero donde uno solo tiene los papeles en regla ¿dejamos pasar al otro o nos mantenemos inflexibles? Nos ofrecerán sobornos que nos vendrán muy bien para mantener a nuestra familia, pero corriendo el riesgo de ser cazados y acabar en la cárcel o algo mucho peor. El juego dispone de 20 finales y nuestras decisiones nos llevarán a ver uno u otro.

 

El apartado gráfico es enteramente 8 bits, que a lo primero puede causar rechazo, pero que es parte de su encanto. El control es sencillo a base de ratón y en alguna ocasión con alguna función concreta, con el apoyo leve del teclado.

 

Originalmente salió sólo en inglés pero desde hace unos días ya está traducido al español y además de forma magistral.

 

Un juego muy original que os recomiendo sin dudar.

 

Se puede comprar en la web oficial o en Steam y está disponible para Mac, Windows y Linux.

 

¡Gloria a Arstotzka!

PULSA PARA ABRIR EL NAVEGADOR