Al contrario de lo que piensa la gran mayoría, los discos duros no solo se dividen en dos tipos; portátiles o de sobremesa, sino que hay una increíble variedad en el mercado que permite que cada usuario pueda conseguir almacenamiento externo a la carta. A lo largo de los 31 números de esta revista te hemos traído muchos ejemplos de esta variedad; desde los discos de mayor rendimiento del mercado, hasta aquellos con la peculiar capacidad de ser accesibles desde varios ordenadores al mismo tiempo. Cada uno tiene su público, y en el caso del LaCie Rugged SSD que vamos a analizar hoy son principalmente usuarios avanzados o profesionales. Solo hay que ver la hoja de especificaciones para darnos cuenta de que la combinación Thunderbolt + SSD no ha sido pensada para que guardemos una copia de seguridad de las fotos de nuestras vacaciones, sino para trabajar con archivos de gran tamaño como puede ser el metraje de una producción en 4k. En este sentido, podríamos hablar del LaCie Rugged como una versión portátil del WD Velociraptor Duo que analizamos en el número 23. Aunque si lo miramos desde el aspecto más estético, el LaCie Rugged podría ser uno de los accesorios con mejor diseño que jamás se han creado. Veamos por qué es tan especial.

El bello acorazado

El diseño del LaCie Rugged es todo un icono. Fruto de la mente de Neil Pulton, la forma y los colores que visten a este disco duro son en las que uno piensa cuando le hablan de LaCie. Como todo aquello que se atreve a realizar algo distinto, el diseño de este disco duro tiene sus partidarios y sus detractores. Yo, una vez visto lo bien que acompaña a mi Macbook Pro Retina no puedo más que caer rendido y situarme en el primer grupo. Y es que no solo se trata de un producto de gran belleza, sino que cada elemento tiene una función práctica que respalda su incursión. Como has podido ver en las fotos, el LaCie Rugged está formado por un cuerpo de aluminio todo rodeado por una goma rugosa de color naranja que se encarga de proteger y dar un toque divertido y original a un producto tan soso como un disco duro.

El aluminio es más rugoso que el que estamos acostumbrados a ver en iPads y MacBooks, una consecuencia del menor pulido al que somete LaCie el aluminio al tratarlo. Al principio puede dar una sensación extraña, incluso llega a parecer que está sucio, pero si tenemos en cuenta que el objetivo es que el disco duro no se resbale de nuestras manos el hecho de pulirlo menos cobra sentido. La misma idea persigue el acabado rugoso de la goma, algo que evita que el Rugged se resbale incluso en superficies inclinadas. Pero esa no es la única función de la goma naranja, también sirve para guardar a buen recaudo el cable Thunderbolt de manera que no lo acabemos perdiendo ni tengamos que preocuparnos por pensar donde lo hemos dejado.

Pese a ser un disco duro portátil, el hecho de contar con dos tipos de conexión y una alta protección hace que no sea especialmente pequeño ni ligero. Su peso es contenido si tenemos en cuenta las características con las que cuenta, y es que debemos tener claro que estamos ante un dispositivo de altas prestaciones.

Pura velocidad

Si hay algo por lo que se caracteriza el LaCie Rugged es por su extrema velocidad. Es tan rápido como bonito. Gracias a su SSD de 500gbs y los puertos Thunderbolt y USB 3.0 no hay tarea o archivo que no sea capaz de manejar en pocos segundos. De hecho, para aquellos que aún tengan un disco duro tradicional en su equipo el hecho de usar el LaCie Rugged como disco de arranque sería como cambiar de ordenador. Sus velocidades de lectura y escritura despeinan a cualquiera y hacen que ya no sea necesario trabajar con determinados archivos en nuestro disco interno. Todo un lujo si entre nuestras tareas diarias se encuentra editar archivos de vídeo.

En cuanto a los métodos de conexión, dado que el SSD no supera los 5gb/s de lectura y escritura no vamos a notar un aumento de velocidad a la hora de decantarnos por el USB o Thunderbolt, aunque dependiendo de cual escojamos tendremos una serie de ventajas o no. Como he comentado antes, el cable Thunderbolt va integrado en el propio disco duro y es capaz de guardarse en la goma que lo recubre. Esto lo convierte en el cable que siempre va a estar disponible a la hora de usar el disco duro, y también el que nunca se nos va a perder. A esto le tenemos que sumar la posibilidad de encadenar hasta 6 dispositivos Thunderbolt en un solo puerto. Eso no quita que la conexión vía USB 3.0 no sea una buena opción, el rendimiento es el mismo, solo que el cable no va integrado en el propio dispositivo ni tenemos las ventas antes mencionadas.

El día a día

Si sobre el papel el LaCie Rugged parece espectacular, en el día a día no lo es menos. Una vez te acostumbras a la rapidez del SSD en tu disco externo volver a usar alguno de tus viejos discos se convierte en una espera continua. En mis pruebas, el mayor salto lo he encontrado a la hora de trabajar con Final Cut Pro X (con vídeos 1080p). Acostumbrado a hacer unas pausas para jugar a algún que otro juego mientras pasaba todo el material de la cámara al ordenador o mientras exportaba, el LaCie Rugged ha reducido mis partidas a un simple café.

Tampoco está nada mal para fotografía. Aquellos fotógrafos amantes del RAW que quieran viajar ligeros pero sin prescindir de su librería encontrarán en el LaCie Rugged un gran aliado. No solo por su gran capacidad y velocidad, sino por su resistencia. Está tan bien protegido que no tenemos que temer por su integridad al sacarlo de casa, y gracias a su color chillón lo podemos localizar de un solo vistazo.

Conclusiones

Puede que su precio, sobre los 500€, convierta al LaCie Rugged en un producto que nunca llegue a las masas, pero eso no quita que sea un grandísimo producto que mezcla de forma exitosa la exclusividad de un diseño que no deja a nadie indiferente con un rendimiento que sorprende a propios y extraños. Está claro que todo el mundo que quiera puede hacerse con uno, pero solo los usuarios más exigentes acabarán por sacarle partido a la inversión.