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L PASADO 9 DE SEPTIEMBRE, APPLE PRESENTABA UNO DE LOS PRODUCTOS MÁS ESPERADOS POR TODOS LOS SEGUIDORES DE LA COMPAÑÍA DE LA MANZANA MORDIDA: EL APPLE WATCH. TRAS INTERMINABLES MESES EN LOS QUE RARA ERA LA SEMANA EN LA QUE NO SURGÍA UN NUEVO RUMOR SOBRE EL RELOJ INTELIGENTE EN EL QUE ESTABAN TRABAJANDO LOS CHICOS DE CUPERTINO, ESTE DISPOSITIVO SE HACÍA POR FIN REALIDAD CON EL “ONE MORE THING” PRONUNCIADO POR TIM COOK, PALABRAS CON LAS QUE APPLE DABA A CONOCER SU APUESTA POR EL MERCADO DE LOS DISPOSITIVOS “WEARABLES”, UNA CATEGORÍA COMPLETAMENTE NUEVA EN LA GAMA DE PRODUCTOS DE LA COMPAÑÍA.
Un diseño alucinante
Como todo producto con la firma “Designed in California”, el diseño del Apple Watch no deja indiferente a nadie Pulsa en el Apple Watch Apple ha tenido muy en cuenta que todos los usuarios somos diferentes

Lo primero que llama la atención al observar por primera vez el Apple Watch es su diseño. Como todo producto con la firma “Designed in California”, el diseño del Apple Watch no deja indiferente a nadie, lo que vuelve a recordarnos el nivel de obsesión de la compañía por el aspecto de sus productos. No nos cabe la menor duda de que el diseñar un reloj ha debido de suponer todo un reto para los chicos de Cupertino, y es que hasta ahora, se trataba de un campo completamente desconocido para Apple. Hay que tener en cuenta que un reloj es un producto que nada tiene que ver con un ordenador o un smartphone, productos en los que Apple cuenta con vasta experiencia. Al contrario que con ese tipo de dispositivos, un reloj de pulsera no está reservado a los amantes de la tecnología, sino que es algo que todo el mundo utiliza. Por esta razón, en Apple se han visto obligados a encontrar un equilibrio perfecto con el objetivo de satisfacer las necesidades de todo tipo de usuarios. Para ello, era necesario ofrecer un diseño que no resultase intimidatorio, sino que en lugar de ello, transmitiera una sensación de cercanía que invitase a utilizarlo. No nos cabe la menor duda de que la empresa californiana ha logrado su propósito, combinando lo mejor del mundo de la tecnología y de la moda para crear un producto con unas asombrosas características técnicas, sin descuidar en absoluto su aspecto. La compañía ya sentó las bases del diseño del Apple Watch con el lanzamiento, allá por el año 2010, del iPod nano de sexta generación. Este dispositivo, que estrenó una nada habitual forma cuadrada, podía ser utilizado como reloj gracias a las correas que Apple comercializaba por separado. Echando la vista atrás, no cabe la menor duda de que, por aquel entonces, en Cupertino ya tenían en mente crear un reloj inteligente, y no estaban haciendo otra cosa que estudiar su acogida.

 

Cuatro años después, con el Apple Watch a punto de llegar al mercado, podemos decir que uno de los puntos a favor de este dispositivo es que Apple ha tenido muy en cuenta que todos los usuarios somos diferentes. Cada uno tenemos una serie de gustos y preferencias estéticas, motivo por el cual en Cupertino sabían que no podían decantarse por comercializar un único modelo. Por esta razón, el Apple Watch estará disponible en tres diferentes colecciones, dos tamaños y varios materiales distintos. Además, tal y como Tim Cook reveló, existen millones de combinaciones posibles derivadas de la posibilidad de poder cambiar cuando queramos la esfera de nuestro reloj, así como las correas que Apple pondrá a disposición de los usuarios de este dispositivo, algo que hará muy complicado ver dos Apple Watch iguales. En definitiva, en las oficinas de Cupertino no pretendían fabricar un gadget más, el objetivo era crear una joya, y para ello tenía que ser irrepetible.

El software, uno de los pilares fundamentales del Apple Watch
El objetivo de Apple ha sido que el contenido se adapte por completo y de forma natural a la pantalla del dispositivo

Además de su diseño, lo siguiente que llama la atención es el software del dispositivo. A la hora de desarrollar el sistema operativo del Apple Watch, la empresa de la manzana siempre ha tenido claro que no se trata de reducir la interfaz de un smartphone y tratar de encajarla como sea en la pantalla de un reloj. Esto conllevaría una serie de problemas importantes, ofreciendo una nefasta experiencia de usuario al no tener en cuenta las debilidades de una pantalla de este tamaño. Por esta razón, en Cupertino han decidido desarrollar desde cero un nuevo sistema operativo: el Watch OS. A pesar de ser completamente nuevo, su aspecto resulta realmente familiar, ya que recuerda bastante a iOS. Como en nuestros dispositivos móviles, la interfaz se basa en la navegación por una pantalla en la que se muestran todas nuestras aplicaciones, y a pesar de que los iconos tienen forma circular (en lugar de la característica forma cuadrada a la que estamos acostumbrados) se trata de algo que sigue la estética introducida en iOS 7, donde destaca el uso de elementos circulares y formas redondeadas por doquier. Como comentábamos anteriormente, la obsesión por los detalles que tienen en Apple es de tal magnitud que han creído conveniente diseñar desde cero una nueva tipografía para el Apple Watch. El objetivo es que el contenido se adapte por completo y de forma natural a la pantalla del dispositivo. Teniendo en cuenta todo lo anterior, el Apple Watch destaca, sobre todo, por su facilidad de uso. Apple ha trabajado mucho en ese aspecto, y gracias a ello, es capaz de detectar incluso cuándo quieres mirar la hora, ya que tan pronto levantes la muñeca, el Apple Watch se encenderá de forma automática, invitando a utilizarlo.

Su hardware: imaginando el reloj del futuro
Han utilizado un elemento absolutamente tradicional para controlar una interfaz en miniatura de lo más novedosa En cuanto al interior del Apple Watch, no cabe duda de que este dispositivo es todo un prodigio de la ingenieria

No cabe duda de que el trabajo realizado en cuanto al diseño y al software de este nuevo dispositivo es inmejorable, pero en Apple también se tuvieron que enfrentar a otro problema: ¿cómo controlar la interfaz del Apple Watch? La mayoría de los relojes inteligentes se decantan por emplear la pantalla táctil como principal fuente de entrada de datos. Por el contrario, en Cupertino llegaron a la conclusión de que este método no es el ideal. El motivo es que, al manipular la pantalla con los dedos, estamos perdiendo visibilidad, ya que tapamos el contenido mostrado en la pantalla, por lo que los típicos gestos que utilizamos a diario en nuestros smartphones -como pellizcar la pantalla para alejar una imagen- no tienen sentido en un dispositivo como el Apple Watch. Se fijaron entonces en un elemento que ha estado presente en los relojes de pulsera desde siempre: la corona. Este elemento es la pieza principal que utilizamos para realizar acciones tan cotidianas como poner el reloj en hora o ajustar la fecha del mismo. A partir de este elemento, Apple ha creado lo que ha denominado Corona Digital. Es decir, han utilizado un elemento absolutamente tradicional para controlar una interfaz en miniatura de lo más novedosa. En el Apple Watch, la Corona Digital te permitirá controlar y desplazarte por los menús y la interfaz del dispositivo. Para ello, únicamente hay que girar la corona hacia un lado o hacia otro, tal y como haces con tu reloj tradicional. No solo sirve para desplazarse por los menús, sino que permite ampliar de forma fácil una imagen para ver todos los detalles de la misma, así como hacer zoom en un mapa sin tapar la pantalla con la mano. Además, esta Corona Digital cuenta con una característica heredada del botón Home del iPhone y el iPad, y es la posibilidad de pulsar la misma para volver al menú de inicio, en el que se encuentran todas las aplicaciones.

 

A pesar de que, por el momento, todavía se desconocen la mayoría de las características técnicas de este dispositivo, Apple ha proporcionado información acerca de las más interesantes. Por ejemplo, destaca su pantalla Retina flexible, que además de ofrecer una excelente calidad de imagen, está recubierta con cristal de zafiro (el segundo material transparente más resistente del planeta, tan solo por detrás del diamante), algo que evitará futuros roces en la pantalla debidos a golpes derivados de su uso diario. Durante su presentación, a pesar de que no se ofrecieron datos sobre la autonomía de su batería, sí que nos mostraron cómo se cargará. Se trata de uno de los aspectos que más llamaron la atención sobre este nuevo dispositivo, y es que Apple ha puesto mucho empeño en que pueda cargarse de forma rápida y sencilla, incluso en la oscuridad. Combinando la tecnología Magsafe presente en el sistema de carga de los MacBooks, con la carga inductiva, han logrado que podamos cargar el Apple Watch de forma sencilla, ya que los imanes harán su trabajo acoplándose a la parte trasera del dispositivo. En cuanto al interior del Apple Watch, no cabe duda de que este dispositivo es todo un prodigio de la ingeniería. Sobre todo, si tenemos en cuenta sus reducidas dimensiones, y es que es realmente complejo introducir toda la electrónica responsable de dar vida a un producto como es este reloj en un espacio tan pequeño. Para ello, Apple ha tenido que integrar en un solo chip -al que ha denominado S1- todos los subsistemas encargados del funcionamiento del reloj.

 

Como decimos, el Apple Watch es toda una demostración de la más asombrosa fusión entre tecnología y diseño. Ahora que ya conoces todo sobre su diseño y características, ¿quieres conocer en detalle cómo cambiará tu vida? Sigue leyendo y

te lo contamos.