El iPad Air 2 tiene en su interior un procesador Apple A8X con tres mil millones de transistores y arquitectura de 64 bits. Es un 40% más rápido que su predecesor en cuanto a capacidad de cálculo y 2,5 veces más rápido respecto a los gráficos. ¿Qué significa todo eso? Que todo irá increíblemente más rápido, cada web por la que navegues, cada app que uses, cada juego que disfrutes. Tu experiencia de usuario será aún mejor. iOS se encarga de exprimir el procesador para conseguir el máximo rendimiento posible con el menor consumo, por lo que a pesar de ser el procesador más potente jamás visto en un iPad y, por extensión, visto en un tablet, sigue manteniendo las 10 horas de autonomía que han caracterizado al iPad desde su primera generación. Y no debes olvidar que iOS incorpora Metal, que hace que las apps y los juegos puedan sacar el máximo partido a las capacidades gráficas del dispositivo, dándote una experiencia a la altura de las consolas de última generación, algo nunca visto en ningún dispositivo de su categoría (e incluso en muchos de categorías superiores). Además, cuenta con el co-procesador M8, lo que le permite capturar todos los datos del giroscopio, acelerómetro, brújula y barómetro sin tener que usar el procesador principal, librándole de estas tareas para que pueda concentrarse en lo suyo.