Introducción e historia

Hablar de Assassin’s Creed es hacerlo de la gallina de los huevos de oro de Ubisoft. Son grandes lanzamientos año tras año y que, al igual que sucede con un Call of Duty, no tienen cabida en el tipo de juego que os traemos mes a mes. Sin embargo esta vez, después de sus Cruzadas en el Oriente Medio, la Revolución Francesa o incluso jugar a los piratas en los mares del Caribe, se han atrevido con una saga de tres episodios con un estilo totalmente diferente. Es un trabajo encargado a Climax Studios, que serán los responsables de llevar a la Hermandad y los Templarios por tres grandes escenarios del siglo XVI, China, India y Rusia a lo largo de tres títulos independientes, todos bajo el abrigo de Chronicles. Así pues el título que nos ocupa, el primero que se ha publicado, se denomina Assassin’s Creed Chronicles: China.

Le metemos media dimensión más a este artículo para encontrarnos un título de plataformas en 2.5D, nombre con el que se denomina aquellos juegos que siendo clásicos de plataformas en 2D, introducen cierta profundidad y movimientos del personaje que hacen uso parcial de una nueva dimensión, pero sin tener la libertad que, un juego en primera o tercera persona nos proporciona. Personalmente es un género que me ha enganchando desde que en su día jugué al Shadow Complex. Un título de Arcade para XBOX 360 que me ha convertido en fan de esta modalidad. De hecho sigo a la espera de una continuación de esa joya.

Pero volvemos a ACC: China. A lo largo de 12 niveles nos moveremos haciendo un mayor uso de las técnicas de ocultación, camuflaje y asesinato de lo que lo hacíamos en sus hermanos mayores, donde los mundos eran abiertos y pasábamos más tiempo trepando y desplazándonos por tejados y calles. En esta ocasión, al ser un arcade de scroll lateral el progreso es más lineal y las sensaciones, por tanto, distintas. No es la primera vez que Ubisoft tontea con este género, ya que en su momento publicaron Assassin’s Creed II: Discovery, tanto para iOS como para Nintendo DS.

La aventura está protagonizada por Shao Jun, quien ya apareció junto al conocidísimo Ezio Auditore en Assassin’s Creed: Embers, la película, pero los hechos del juego se sitúan dos años después de los eventos que se narran en esa película. Estamos en China y la Hermandad se encuentra casi extinta, siendo Shao Jun la última asesina y que pretende vengarse de los templarios acogidos en China bajo el nombre The Tigers. Al principio de la historia se hace referencia a una caja entregada por Ezio a Shao Jun, pero no se profundiza más en su procedencia ni en los poderes de la misma. A partir de ahí, comienza nuestra fuga y su venganza. Para ello tendremos que localizar 5 objetivos para lo cual realizaremos una serie de misiones perfectamente estructuradas alrededor de esa misión de localizarlos. Paralelamente realizaremos misiones complementarias como ir rescatando prisioneros y liberando gente. Si bien podemos hacer uso de la fuerza, el juego está diseñado para que potenciemos nuestras habilidades en el uso del sigilo y las trampas, causando el menor número de víctimas posibles, y siendo siempre recompensados con mayores puntuaciones y trofeos por ello. Hay un par de escenarios que más que asesinar o ocultarnos, correremos a lo largo de los mismos al más puro estilo parkour, escapando entre edificios en llamas, deslizándonos bajo techos y restos que se caen, no es la tónica general del juego pero siempre viene bien variar.

Para alguno quizás le parecerá un título un poco lineal en su jugabilidad ya que muchas veces nos limitaremos a escalar, descender y saltar, esperar el momento oportuno, llegar al punto de sincronización, estudiar el mapa y los movimientos de los enemigos y entonces, con dosis de paciencia, actuar. No obstante está muy bien ambientado y resulta sumamente entretenido. Si somos descubiertos comenzaremos desde el último punto de control, nada grave pero sí a tener en cuenta. En el apartado gráfico no hay mucho que reseñar. Es un trabajo de un estudio grande y casi no hay fisuras. Animaciones muy trabajadas, escenarios increíbles, una muy buena utilización de pinturas 2D imitando a grabados chinos con elementos 3D, que son combinados principalmente para ir contando las historias que transcurren entre cada misión. La paleta de colores es perfecta y, en la versión que he jugado, PS4 corre perfectamente a 1080p y 60 fps.

Se podría decir que los gráficos de este juego rozan más lo artístico que lo poligonal de otros títulos, desde luego se ve menos 3D que otros juegos similares y es de agradecer. Incorpora elementos muy conocidos de esta saga como “la sincronización”, ese momento que nos da una visión general del entorno y posteriormente realiza un salto mortal para acabar escondido en, por ejemplo, un carro de paja o un río. La música está perfectamente adecuada y localizada al ambiente en el que nos movemos, sonidos más que correctos y poco más que destacar en este aspecto. Puedo sonar un poco frío pero estamos hablando de Ubisoft, y es lo mínimo que se puede exigir a un estudio de esta índole, sin embargo, pasan con nota.

La respuesta a los controles es precisa, respuesta rápida a nuestros movimientos, aunque a veces los saltos fallan pero en general, botones y controles funcionan a la perfección y en todo momento recibimos feedback en pantalla de los botones a utilizar, por lo que no debería resultar un problema.

Mi recomendación es que si nunca has probado un juego de esta saga, y no te atraen los juegos en tercera persona, pero hasta oído y leído a lo largo de estos años sobre sus distintos títulos, tienes una buena oportunidad de catarlo a través de esta entrega. Su precio, más que razonable, de 14,99 euros lo colocan en una posición aceptable para considerar su desembolso.

Si bien las voces no están dobladas, están en inglés, los textos, menús y ayuda se encuentran en castellano en las tres plataformas en las que se puede adquirir, PC Steam, PS4 y XBOX One.

Por mi parte estoy deseando que anuncien la disponibilidad del siguiente territorio, la India.