El altavoz bluetooth se ha convertido en uno de los periféricos más recurridos sobre todo desde que los dispositivos móviles se han asentado en nuestra rutina. Una solución para mejorar la calidad y el volumen del audio procedente de cualquiera de nuestros gadgets y que además comparte cierta movilidad con éstos. Es por esto que existan cada vez más modelos atendiendo a usos concretos o a diseños innovadores.

Es ahí donde encaja el Colour Cube, un altavoz bluetooth cuyo diseño y dimensiones van enfocados a crear un ambiente en el sitio donde se usa, más allá de la movilidad, además de potenciar el sonido.

Diseño y materiales

Se trata de un sistema de dos altavoces incrustados en una estructura en forma de cubo con las esquinas romas. El material es un plástico con una mínima rugosidad que facilita el agarre, algo que puede ser clave en el caso del modelo de mayor tamaño, 40 x 40 centímetros, dado que estas dimensiones resultan en un transporte bastante incómodo.

Apagado, el altavoz es blanco. Y lo decimos así porque la principal característica de este dispositivo es la posibilidad de que emita luz de colores. En cuanto a esto hay distintas opciones (un color fijo, aleatorio, que siga el ritmo de la música, etc.) las cuales se eligen desde el pequeño mando a distancia que viene adjunto con el altavoz. Desde aquí se regula además la intensidad y todo lo relativo a las luces, así como un control de la reproducción y algunos botones para los ajustes y la sincronización.

Características técnicas

El altavoz Colour Cube funciona con Bluetooth 3.0 (se sincroniza de manera habitual y sin problemas con los dispositivos). Enfocado a un uso sobre todo exterior (para ambientación), el altavoz tiene la certificación IPX4 de resistencia al agua, lo cual protege ante chorros (menores de 10 litros por minuto y de 80 kN/m² de presión durante un tiempo menor a 5 minutos). El plástico es rígido y según el fabricante resiste hasta 120 kg de peso, de ahí que nos sirva tanto para el audio como para mesa e incluso para silla.

Tiene dos altavoces incrustados en lados opuestos de 10W de potencia cada uno. Se alimenta mediante una batería interna que se carga a la luz (incluye adaptador) con una autonomía aproximada de 7-8 horas. Así, está disponible en tres tamaños: 20 x 20cm, 30 x 30cm y 40 x 40cm

Resumen y aspectos a mejorar

El altavoz Colour Cube resulta una buena idea si solemos organizar eventos o veladas tanto en interiores como en el exterior y busquemos crear un ambiente con efectos de luz suavizada. Una solución también para establecimientos con terraza con cierta tranquilidad en cuanto a que caiga algún líquido sobre él.

A mejorar: la potencia de los altavoces puede quedar corta en según qué ocasiones (en una de estas terrazas, por ejemplo), aunque para interiores suele cumplir. Por otra parte, a la hora de transportarlo se echa de menos alguna hendidura que haga las veces de asa, sobre todo en el modelo de mayor tamaño.