iPad Pro. Dos versiones bajo un mismo nombre. Continúa abajo
Desde el 4 de abril tenemos a disposición el iPad Pro de 9,7 pulgadas. No se trata de una versión mejorada del iPad Pro de 12,9 pulgadas que Apple presentó en el mes de septiembre de 2015, sino de un nuevo modelo con fabulosas características que viene a ofrecer una alternativa en tamaño de pantalla y alguna interesante mejora en su interior respecto a la versión grande. Ya nos hubiese gustado que le llamasen de alguna forma diferente ya que a partir de ahora cada vez que se hable del iPad Pro siempre habrá que acompañar el “apellido” sobre el tamaño de su pantalla, bien en pulgadas o imaginamos que se acabará hablando del iPad Pro “grande” o del iPad Pro “pequeño”. A estas alturas de la película que Apple nos ofrece con cada actualización muchos de nosotros estábamos esperando un nuevo iPad Air, el 3 por supuesto. Pero han preferido no actualizar (¿por ahora?) el iPad Air y sí ofrecer un iPad Pro con la misma configuración estética que este pero ubicado en un nivel superior al que se empeña en denominar Pro.
En su marketing se esfuerzan en hablar de cosas como que “No es un ordenador. Es un superordenador.”, u otras como que “Es una visión radicalmente nueva del ordenador personal para el mundo moderno”. Desde nuestro punto de vista no es ese deseado superordenador y sin embargo sí aceptamos de mejor grado la segunda parte: podría considerar que en el mundo moderno, para realizar un gran porcentaje de las actividades que realizan las personas con sus dispositivos portátiles, el iPad Pro se puede ocupar perfectamente de todo y para muchos será el sustituto de su ordenador portátil. Suerte para ellos, pero ya te adelantamos que esto no vale para la mayoría. El iPad Pro mejora no solo al iPad Air, sino también al iPad Pro
La intención de Apple es que tu vista tenga la misma percepción al trabajar con su dispositivo que la que tendría si trabajase con un papel

El iPad Pro de 9,7 pulgadas mejora en muchas cosas de su interior al iPad Air 2 e incluso también han incorporado cuestiones que mejoran al iPad Pro de 12,9 pulgadas. Respecto a este último las mejoras incluidas se refieren a una nueva pantalla True Tone que se adapta perfectamente a la luz del entorno en el que te encuentres en cada momento. La intención de Apple es que tu vista tenga la misma percepción al trabajar con su dispositivo que la que tendría si trabajase con un papel. Algo muy interesante y a lo que te acostumbras con facilidad, sobre todo si después de un tiempo con esta característica activada decides volver a “la configuración normal”. Entonces lo verás demasiado frío y azulado, como siempre ha sido en los iPad anteriores, pero ya notarás que simplemente, es diferente.

 

Una de las opciones que han decidido incorporar también es la posibilidad de disponer del iPad Pro de 9,7 pulgadas en una configuración de 32 GB de almacenamiento, cuestión que no existe en su hermano mayor y que hace más fácil la elección entre este modelo, su hermano mayor o el iPad Air 2 que tan solo está disponible en configuraciones de 16 GB o 64 GB. Apple, una vez más sabe segmentar su gama de productos a la perfección y traza muy inteligentemente las líneas que separan las gamas.

 

El resto de mejoras del más reciente iPad Pro se encuentran dentro de su cámara iSight, la trasera para entendernos. Ahora incorpora un sensor de 12 Mpx y la protuberancia que conocemos de las últimas hornadas de iPhone ya que en realidad se trata de esa misma cámara. Una altísima calidad fotográfica que ahora permite en este iPad grabar vídeo en calidad 4K con estabilización con calidad de cine y a cámara lenta en 1080p a 120 f/s o en 720p a 240 f/s. Además también incorpora por primera vez en un iPad el flash True Tone que tan buenos resultados ofrece en situaciones de poca luz en los iPhone. En la cámara Facetime HD también incorpora la novedad de poder utilizar el Retina Flash, ese fogonazo que emite la pantalla en blanco para que las fotografías con la cámara delantera puedan beneficiarse de un poco de luz artificial añadida.

Una cuestión financiera
Apple seguirá vendiendo muchos iPad Pro, cada vez menos en comparación con los iPad que vendía hasta la fecha, pero ingresará más dinero

Apple lleva muchos meses viendo como las cifras de ventas de iPad disminuyen. No se trata de un descalabro para la compañía, pero no encaja con el esquema de crecimiento al que nos tiene acostumbrados en sus otras líneas de negocio. Y recalcamos que no se trata de un palo demasiado grande para ellos porque sus beneficios globales sí que siguen creciendo en cada informe de resultados. Y esto es justo lo que quieren

que siga sucediendo.

 

El iPad Pro es una nueva categoría que se han inventado, que no era necesaria en absoluto porque podrían haber seguido sacando iteraciones de su iPad Air, aumentando el tamaño de la pantalla del dispositivo e incorporando las características novedosas a cuentagotas, como tan bien saben hacer. Pero no lo han hecho. Han pensado en un doble ataque con el iPad Pro. Una punta de lanza con el cambio de nombre/categoría para atraer a un sector profesional y dotar a los usuarios de un estatus mayor con el término Pro que saben que funciona con muchos de sus fieles y otra línea con el aumento de los precios de forma considerable. Ahora el iPad Pro de 9,7 pulgadas más económico, el Wifi con 32GB es más caro (679€) que el iPad Air 2 más caro disponible a la venta, el Wifi+celular con 64 GB (649€). Esto es una diferenciación de las gamas por precio. O eres Pro o no lo eres, pero si lo quieres ser lo vas

a pagar.

 

Por otra parte, la cuenta que siempre haces cuando vas a comprar un nuevo iPad pasa por contemplar cuánto cuesta aumentar de capacidad y cuánto cuesta añadir conectividad de datos además de Wifi. Con el iPad Air 2 pasar de 16 GB a 64 GB supone añadir 100€ al presupuesto y si quieres añadir la posibilidad de incorporar datos al dispositivo has de retirar 120€ más de tu cuenta. En el caso del iPad Pro pasar de 32 GB a 128 GB de almacenamiento cuesta 180€ y si optas por la modalidad de conectividad de datos entonces pagas 150€ extra. Cada vez un poco más y cada vez mayor diferenciación entre gamas con no tanta diferencia entre lo que ofrece realmente

el producto.

Apple seguirá vendiendo muchos iPad Pro, cada vez menos en comparación con los iPad que vendía hasta la fecha, pero ingresará más dinero. Su cuenta de resultados en este apartado tiene que seguir fuerte y su estrategia parece que está orientada a ingresar lo que haga falta a sabiendas de que existe un buen número de usuarios que son capaces de pagar esto y más por sus productos.

Los accesorios suman capacidades y coste
En nuestra opinión el Smart Keyboard no es una opción si quieres obtener todo el rendimiento de tu iPad Pro. Hay que tenerlo

En el caso del iPad Pro, ya lo dijimos con el de 12,9 pulgadas, los accesorios son una pieza fundamental que Apple ha querido trabajar con esmero. Aportan su llamativo Pencil y su flamante Smart Keyboard que parecen casi inseparables del iPad Pro aunque por supuesto suponen una opción. Por ahora el teclado para el iPad Pro no está disponible con la configuración de teclado en español aunque es de esperar que en muy breve esté disponible. Es un teclado y es una funda que puedes sustituir por la de otros fabricantes, sin duda, pero estarás perdiendo el fantástico diseño que ha logrado Apple y también la conexión que se realiza a través del Smart Connector que hace que no tengas que emparejar por Bluetooth ni utilizar ningún tipo de aporte de corriente al teclado que no sea el que suministra el propio iPad. En nuestra opinión el Smart Keyboard no es una opción si quieres obtener todo el rendimiento de tu iPad Pro. Hay que tenerlo.

 

El Pencil sin embargo es un accesorio que es espectacular en cuanto a las opciones que nos han enseñado en su presentación pero que no estamos seguros de que todos los usuarios lleguen a ser capaces de exprimir como para hacerlo rentable. La decisión de adquirirlo será una cuestión muy personal que vendrá marcada por la utilidad que se le vaya a asignar.

El Apple Pencil para el iPad Pro cuesta 109€ y el teclado se va a los 169€. Otra pequeña cuenta que hay que realizar a la hora de hacer la inversión en un iPad Pro. Si eres un profesional realmente te irás a la versión más capaz en almacenamiento y mejor conectada de 256 GB que vale 1189€, a la que le hemos de sumar el coste de los accesorios para tener un total de 1467€. Es un precio importante para un dispositivo con un sistema operativo portátil en su interior y que obliga a pensar en las alternativas de otras compañías como Microsoft o incluso en el salto de la modalidad tableta a otras opciones dentro de los ordenadores portátiles más potentes y ligeros.

 

El iPad Pro en sus dos versiones y su único nombre está con nosotros. Supone un salto cuantitativo en la forma de acceder al mismo y también la incorporación de nueva tecnología innovadora por parte de Apple. Como producto independiente es de lo más atractivo y para los que ya utilizan iPad será un paso muy interesante. Como movimiento estratégico de la compañía en cuanto a la incorporación de esta nueva categoría Pro y la gestión de los precios nos hace pensar que al fin y al cabo nuestra queridísima Apple también es una empresa además de una marca que nos tiene enamorados, todavía.