Este va a ser el año, sin duda alguna, de los juegos indies o juegos de estudios independientes. Si “The Witness” nos sorprendía con un planteamiento de juego nunca antes visto, el juego que te traigo este mes puedo decirte, sin lugar a equivocarme, que nunca has jugado a nada igual.

Normalmente selecciono para esta sección un título donde, o bien el juego en sí mismo, o bien la historia detrás de su desarrollo, me sorprendan de algún modo. Todo alrededor de “SUPER HOT” me ha cautivado. Y sí, lo escribo así, en mayúsculas, porque querido lector, empieza a acostumbrarte al sonido de esas dos palabras… van a golpear tu cerebro de un modo que ya quisiera la canción del verano.

La historia comienza en una JAM de videojuegos, concretamente una FPS Game Jam de 7 días (para entendernos, un encuentro o party en la que desarrolladores y creativos del mundo de los videojuegos se encierran por 7 días compartiendo todo tipo de ideas y se retan a crear el mejor juego, el más innovador o el más alocado en ese periodo tan corto de tiempo). De ahí nace la primera versión de SUPER HOT. ¿Qué no me crees? Tan real como que todavía puedes jugar a la versión que se creo en su momento si eres tan valiente de arrancar Internet Explorer, Opera o Mozilla y acceder a su página. El juego difiere del producto que te estoy comentando, pero su esencia, lo que lo hace único, está ahí y funciona en un navegador, lo que me parece increíble.

¿Qué pasó después de esa semana de creatividad? Pues que el título tuvo tal aceptación que se lanzaron de lleno a buscar financiación, primero a través de Greenlight de Steam (como sabes es una iniciativa de VALVE para aquellos juegos que todavía están en desarrollo o idea pero que de algún modo puedes probar en su versión preliminar en Steam y votar si te parece que tiene futuro para, como su nombre dice, darle luz verde y que se materialice en un título comercial), y posteriormente a través del tan recurrido Kickstarter.

Tras el éxito en los fondos recaudados y unas cuantas versiones después y llegamos a este 2016 donde por fin es lanzado para PC, tanto a través de STEAM, como a través de GOG, donde por cierto, aparte de a mitad de precio, te lo descargas libre de DRM (protección) y es tuyo para siempre.

Vale, vale, lo sé. Estás ansioso por saber de qué demonios trata. Basta de historias. Vamos al grano. SUPER HOT como juego es realmente complicado de describir. Tanto que me he pasado días intentando buscar la forma de contarte sobre él y no caer en tópicos. Se podría encuadrar dentro de los títulos de acción en primera persona o FPS, pero su mecánica es lo que lo hace único.

No puedo decirte que eres tal o cual personaje, porque destrozaría la historia y el argumento. La similitud más cercana que he encontrado a lo que vas a vivir es la esencia de la película de Matrix. Imagínate que de repente alguien empieza a escribir en la pantalla de tu equipo. De hecho la primera pantalla que verás es un monitor imitando a un viejo terminal de comandos, al estilo MSDOS (sí, solo los viejos lectores sabemos de que hablo, pero tenía que decirlo). En esa pantalla alguien, un amigo quizás, comienza a chatear contigo y te reta a ejecutar un software que te acaba de enviar. Tú ves ese ejecutable y como no podía ser de otro modo lo abres. Así, sin protección, a saco. Ahí inicia tu aventura. La pantalla empieza a hacer cosas extrañas y entras en una habitación totalmente blanca, en un estilo que me recuerda mucho a Mirror Edge, con tonos en blanco pero perfectamente iluminado para percibir todo el entorno. Un tipo totalmente rojo viene hacia ti pero algo sucede, si no haces nada, si no tocas ningún botón de tu mando el tiempo parece haberse parado. Solo cuando nos movemos, todo se mueve. ¿Es eso? ¿Controlas el tiempo? No. No te equivoques, esperas un momento sin hacer nada y verás que todo se mueve, sí, sí que lo hace, pero muy, muy despacio, tan despacio que te sientes Neo en modo Super Sayajin viendo como todo se mueve súper lento a tu alrededor.

¿Qué debemos hacer? Pues reaccionar, defendernos, atacar, resolver cada una de las situaciones que nos tocará vivir en esta historia usando ese poder a nuestro favor. Nos dispararán, dispararemos, utilizaremos los puños y todo lo que tengamos a nuestro alrededor para salir vivos y airosos de cada uno de los retos que se nos plantearán.

Es muy curioso, porque si bien todo se mueve tan lento que parece que el tiempo está detenido, sentiremos la opresión de que no tenemos casi un instante para decidir que hacer. Puedo decirte que lo último que me imaginé la primera vez que jugué es que iba a sentir tal presión, tal sensación de que no iba a ser capaz de reaccionar a lo que estaba sucediendo en mi pantalla.

Cada vez que resuelvas uno de estos escenarios la acción correrá veloz ante tus ojos a modo de repetición, mientras una voz en off no dejará de repetir “SUPER HOT” “SUPER HOT” “SUPER HOT”. Podrás ver, editar e incluso subir “las mejores jugadas” a un espacio web que han creado específico para este título que se llama killstagram.com. Como ves, humor no les falta a estos chicos.

Vuelvo a repetirme, es muy difícil de describir. Tienes que probarlo tú mismo. A diferencia de otros juegos donde te podría decir que es como jugar a tal o a cual, somos afortunados de tener en menos de dos meses dos títulos que nos sorprendan tanto en su jugabilidad.

Gráficamente es más que correcto, juegan mucho con la iluminación, los tonos blancos, negros y rojos, para buscar la ambientación perfecta entre estar metido dentro de un sueño y realidad. La historia está perfectamente hilvanada y a cada instante nos irá sorprendiendo. El sonido no es gran cosa, los efectos perfectos pero es un título netamente visual, cinemático y juega precisamente con eso a su favor. Han conseguido un estilo muy único, tanto que tras jugarlo no podría imaginarme este juego con otro aspecto.

El interface es un monitor que quien hay usado hace muchos años un PC reconocerá al instante. Hasta diría que es una copia del Comandante Norton para PC. Está lleno de pequeños detalles, guiños, juegos escondidos dentro de los menús, arte en ASCII, en definitiva, pullita a la añoranza de los más viejos del lugar.

Si eres un jugón más jovencito seguro te resultará curioso pero no te sentirás identificado, aunque no te será molesto.

Si bien como comentaba, en STEAM está un poco más caro, sobre 20 euros, búscalo por otras webs, como GOG.com, porque se encuentra por menos de 10 euros. El juego está totalmente doblado a castellano en todos sus textos y menús, no hay voces más allá del machacón “SUPER HOT”, por lo que no tienes excusa tampoco en este apartado.

Si tuviese que ponerle una pega solo sería la duración. Si eres hábil te lo acabarás en poco más de tres horas, pero en condiciones normales es más extenso, y oculta sorpresas que hacen que podamos disfrutarlo un poquito más.

Es una adquisición segura para todos aquellos que amamos los videojuegos, es un título de colección y, si me apuras, pronto de culto. No te lo estoy recomendando solo porque sea diferente, te lo recomiendo porque no te dará un segundo de respiro y te enganchará, es condenadamente entretenido, es, para no decir nada más, ¡“SUPER HOT”!